domingo, 3 de julio de 2011

Las estrellas NBA solo emigrarían si no hay Liga.

En 1998-99, la NBA vivió un cierre patronal de 204 días. Tras la cancelación de 464 partidos, esa temporada comenzó el 5 de febrero de 1999, con un calendario de 50 partidos. Esa situación aceleró y remató la descomposición de los campeones, los Bulls de Phil Jackson y Michael Jordan: que regresó en 2001, en Washington.­ Tras 13 años, la historia se repite, en circunstancias similares: manda el deseo de los propietarios de reducir sus nóminas en unos 750 millones de dólares, más otros recortes adicionales.
¿Hasta qué punto abriría este cierre patronal de la NBA (lockout) la puerta a otras Ligas? La respuesta depende, esencialmente, de la duración del cierre. Si se alargara, muchos jugadores empezarían a hacer planes. Pero sólo si se alargara. Jugadores como Calderón y Marc Gasol (cuyo contrato en Memphis acaba de expirar) coinciden en que "no tiene sentido comprometerse con nadie para tener que marcharse en dos o tres meses". Ayer, en TVE, Pau Gasol matizó: "Con el buen momento que atraviesa la NBA, sería extrañísimo que se suspendiera la temporada entera. Sería difícil jugar sólo unos meses en un club e injusto para ese club que apuesta e invierte; por otro lado no me gustaría estar un año parado, un año sabático: nuestra carrera es limitada y tenemos que aprovechar lo que tenemos () España sería la primera opción, pero no la única. También está la de China".
Puede anticiparse que incluso Kobe Bryant (que planea dedicar el verano a "ponerse fuerte") piensa bastante parecido a Pau. Kobe, que pasó su niñez en Italia, ya dijo algo sobre mirar la Lega italiana. Pero Dwight Superman Howard, el pívot de Orlando (por ahora) ha declarado que hará "cualquier cosa menos jugar a baloncesto".
Aviso a navegantes: Bryant tiene el mejor contrato para la eventual temporada 2011-12 en la NBA, una anualidad de 17,42 millones de euros, antes de impuestos. Nowitzki y Pau Gasol van en la banda de 13 millones de euros. Howard, 12,3 millones de euros. En torno a los 12 millones de euros se mueven LeBron James, Chris Bosh y Wade. Más cerca de tierra, un buen jugador de clase media-alta como, por ejemplo, Trevor Ariza, tiene con los embargados Hornets un contrato de 6,8 millones de dólares: unos 4,7 millones de euros. Cada aproximación a uno de estos jugadores conllevaría la negociación casi inexorable de un seguro, al margen de casos peculiares como Marc Gasol. Esto es lo que hay mientras haya cierre.

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